En agua la mirada
perdida en la lejanía.
La fachada pintada
tapa las cicatrices,
mientras el interior
esconde lo evidente.
La distancia es ínfima
pero me destruye
dejándome atrapada
en mi soledad.
Los días se arrastran
y traen a la noche,
benévola oscuridad,
creadora de sueños.
domingo, 13 de octubre de 2013
Suscribirse a:
Entradas (Atom)